

La construcción de una simple calle, podría significar el final de 87 años de historia para un lugar que ha cobijado a más de cuatro generaciones de deportistas, la cancha del Club Deportivo Coilaco.
A través de las redes sociales, fue que los jugadores del antiguo club deportivo conocieron que existe un proyecto financiado por el Ministerio de Educación de construir una calle que dividiría la por la mitad, la cancha construida en 1933, así lo señaló Rodrigo Bizarro, Jugador y Delegado del club deportivo Coilaco.
En tal sentido, Bizarro detalló el proyecto formaría parte liceo Pedro Aguirre Cerda y de la Escuela Especial Ñielol, ambos recintos educacionales colindantes a la cancha del Club, “al analizar el plano de dicho proyecto, y como parte de este, aparecía la construcción de una calle que pasaría literalmente por el medio de la cancha que tantos domingos sus protagonistas llenaron de gambetas y abrazos,” expresó.
Al enterarse de la construcción, Bizarro mencionó que se realizó una asamblea con todos los vecinos jugadores del club, posterior a ello, estuvieron “puerta a puerta” en la comunidad para “informar y explicar a los vecinos la actual situación ya que por la pandemia se dificulta que los vecinos puedan enterarse de todos los pormenores del proyecto que no solo afectaría a la cancha, sino al barrio coilaco, al cementerio y al cerro.”

También, el pasado 30 de agosto, realizaron una marcha familiar por el sector Barrio Coilaco (iniciando por la calle Blanco del Hospital, pasando por Montt, y Carrera) a la que asistieron mas de 150 personas, evidenciando así el apoyo de los vecinos hacia el club deportivo.
Sin respuesta Municipal
Bizarro, destacó que hace un par de semanas, tuvieron una reunión con el Alcalde de Temuco , Miguel Becker, “él se comprometió a revisar el proyecto junto a su equipo, para ver que posibilidad hay de conservar la cancha.”
Sin embargo, a los pocos días, de dicho encuentro, fueron llamados por nuevamente por un personal de la municipalidad quienes “en menos de 30 segundos” afirmaron que no había posibilidades de conservar la cancha, sin ningún sustento técnico, solo de manera verbal, señaló Bizarro.
A pesar de la negativa, los vecinos aún no se resignan a perder su lugar el cual tiene un fuerte vínculo con el barrio, por lo han solicitado por ley de transparencia conocer en detalle el proyecto la calle, “el cual aún no llega a nuestros correos.”
El apoyo de la junta de vecinos, de los locatarios de calle blanco, así como de las organizaciones que defienden el cerro Ñielol, y las organizaciones deportivas de futbol amateur, son el principal motivo para seguir luchando por defender la cancha del centro deportivo Coilaco.
Puros curahuillas en esa cancha y mas encima malos para el futbol. Demosle la prioridad a los colegios y al progreso de la ciudad que tanto necesitamos. Mas colegios, mas educación y menos focos de delincuencia y peloteo.
Una vergüenza que estos pungas desocupados se adueñen de lo que no les corresponde. Apoyo total a Becker.