La ministra a pesar de algunos percances, culminó realizando todas las actividades planificadas.
La mañana de ayer martes comenzó con una agenda muy apretada para la nueva ministra del Interior, la doctora Izkia Siches, y su grupo de ministros, quienes le acompañaban en comitiva de Gobierno. Visitaron Ruka Maquehue y dejaron el lugar con un gran compromiso de cara al diálogo con las regiones, pero, a media mañana mientras se dirigían a un encuentro con la familia Catrillanca, un recibimiento a balazos cambió la agenda completa de esta primera visita a la región.
Todas las reuniones agendadas se realizaron, eso sí, hubo un cambio, se prefirió la seguridad del edificio de la Delegación Presidencial de La Araucanía para realizarlas, cosa que se hizo hasta cerca de las 22.00 horas, momento en que la ministra abandonó el establecimiento en una férrea caravana de seguridad.
Solo queda la espera por el nombramiento de las autoridades regionales, como es el caso de las seremías.
De lo que no hubo dudas, es que la visita de la ministra del Interior culminó como la noche de un día agitado, como si la hubiese planificado Lennon y McCartney.
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