La historia detrás de los malabaristas callejeros: “Tuve la oportunidad de trabajar con La Chilindrina”

Un semáforo en rojo determina el tiempo que tienen los artistas callejeros para demostrar su talento y lograr impresionar a las personas que esperan pacientemente dentro de sus vehículos llegar a sus hogares

Los conductores y transeúntes, ignoran la gran historia que se esconde detrás las estas personas que les regalan unos segundos de entretenimiento a cambio de unas monedas.

Jorge Alcarzar, malabarista callejero desde el año 1995, se turna en distintas calles de la ciudad de Temuco, para mostrar su arte a los viajeros, sin embargo, también ha tenido la oportunidad de viajar por todo Chile, y fuera de las fronteras mostrando su trabajo siendo parte de la atracción de distintos circos.

Maria Antonieta de las Nieves, mejor conocida como “La Chilindrina”, fue una de las figuras mas reconocidas con quien tuvo la oportunidad de trabajar en un circo de Perú, “a ella (la chilindrina) la contrataron por cuatro días, así que tuve la oportunidad de conocerla, fue súper linda la experiencia”

Alcarzar, ha pasado largo tiempo en su vida trabajando para circos como Circo Alondra, Circo Hermanos Inostroza, Circo Panamericano, alternando siempre con el trabajo en la calle, con el cual se gana aproximadamente 15.000 pesos diarios.

Por su parte, “Lalo” como se apodan dos compañeros que desde hace más de 20 años, hacen arte callejero tocando la percusión, también forman parte de la entretención con una interpretaciones variadas en su repertorio.

Se consideran a si mismos nómadas, “nunca estamos en su sitio fijo, siempre nos andamos moviendo”, dedicándose de lleno a su trabajo a todo lugar donde llegan.

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