La joven se encontraba esperando cama UCI en el Hospital Regional, sin embargo debido a la cantidad de pacientes con Covid-19 la capacidad hospitalaria se había visto colapsada, y por ello tuvo que ser trasladada a la capital chilena, donde finalmente fue intervenida.
El comienzo de una nueva historia en su vida es lo que ha significado para Nicol Bizama, el haber sido operada del tumor cerebral que se le fue detectado a principios del mes de noviembre en Temuco, y por ello se mantenía interna en el HHHA en espera de cama UCI para su intervención, sin embargo finalmente fue trasladada a Santiago, y operada en el “Instituto de Neurocirugía Dr. Alfonso Asenjo”.
Fue el pasado 26 de diciembre cuando la joven de 28 años, ingresó al instituto de la capital chilena y 5 días más tarde, el 1 de diciembre fue intervenida quirúrgicamente en una operación que duró aproximadamente 5 horas.
“Yo solo desperté en la UCI a las 4 de la tarde, con uña video llamada que hizo el doctor a mi familia para que supieran que estaba bien, y que estaba viva, ahí me puse a llorar de felicidad, de emoción y de dar gracias a Dios y a la virgen, me cortaron todo el pelo pero eso no es lo más importante, estaba feliz de estar viva”, expresó.
“Siento que volví a nacer” fueron las palabras que expresó la joven tras la cirugía, la cual no le ha dejó ninguna secuela negativa en su cuerpo, “cuando me di cuenta que podía mover mis pies, mis manos, que podía hablar vi que había quedado sana, y mi recuperación fue súper rápida(…) puedo caminar puedo ir al baño, pero estoy viva gracias a Dios”
Tres días después de su intervención, Bizama fue dada de alta, sin embargo se mantiene en la Región Metropolitana en espera de su control médico la próxima semana, anhelando volver a Temuco para reencontrarse con su familia, sobretodo con su pequeño hijo de 10 meses de nombre Maximiliano a quien no ve hace un mes.
Bizama agradeció la atención hospitalaria que le fue brindada en el “Instituto de Neurocirugía Dr. Alfonso Asenjo” y al neurocirujano Francisco Rojas, de igual forma aprovechó la oportunidad para dar gracias por el apoyo que recibió por parte de su familia y colegas de trabajo del Hospital Regional, así como el de las personas que no la conocen.
“Les quiero agradecer de todo corazón a Dios y a la virgencita, a mi familia, a mis primos, tíos, a mis suegros, a mis papas, a mis hermanos, a mi pareja que ha sido fundamental y a mi hijo que me dio la fuerza para seguir adelante(…) también a toda la gente que no me conoce, que rezo por mi, que oro por mi, que le pidió a los santos que sin conocerme me tomo cariño (…) que me hayan apoyado en esto que no me sentí sola ni un segundo, estaba muy tranquila lo único que quería era una oportunidad de vida” destacó.
La joven de 28 años, quien es funcionaria del Hospital Regional de Temuco, también agradeció el apoyo de sus colegas, de su jefa así como de todo el personal del HHHA.
Vale recordar que Bizama, se encontraba esperando cama UCI en el recinto, sin embargo debido a la cantidad de pacientes con Covid-19 la capacidad hospitalaria se había visto colapsada, y por ello tuvo que ser trasladada a la capital chilena, donde finalmente fue intervenida.
“Aunque el camino se vuelva oscuro siempre al final del túnel sale la luz , nunca pierdan las ganas de vivir, y nunca pierdan las esperanzas y lo más importante que nunca pierdan la fe en Dios (…) Yo estoy feliz de la nueva oportunidad de vida siento que volví a nacer y estoy orgullosa de mi marca de guerra que llevo de ahora en adelante” Nicol Bizama.
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